Mamá, ¡el día de hoy no puedo reposar! - crucifix.es

Los nervios por la vuelta al cole, por regresar a conocer a los amigos, por separarse de ti… toca relajarse a fin de que mañana llegue un nuevo día, pero semeja que el día de hoy cuesta mucho más.

 

¿Cuántas ocasiones te pasó a ti lo mismo? Estar en cama dando vueltas y vueltas a la cabeza sin poder conciliar el sueño.

Semeja que los pequeños deberían caer redondos por si acaso solos tras la actividad día tras día que derrochan. No obstante no en todos los casos es de este modo.

Administrar ese revoltijo de conmuevas que les toca lidiar cada día, es tan profundo como cualquier duro día de trabajo tuyo.

Con el añadido de que ellos todavía no tienen las herramientas que tienes tú para gestionarlas.

Pero sí tenemos la posibilidad de empujarlos con una técnica que está a su alcance.

La respiración.

Fíjate de qué manera respiras, ¿hay espacio en tus pulmones?  Haz una respiración profunda. Es increíble el espacio que se libera. Prueba.

En verdad, de ahí que suspiramos. Con cada suspiro procuramos abrir espacio en nuestro interior.

La respiración se relaciona de manera directa con las conmuevas y ser siendo consciente de ello desde niño, les deja tener a su alcance la mejor herramienta para gestionarlas desde el acto mucho más simple y preciso que todos hacemos: respirar.

 

 

Llámale como desees: yoga, meditación, relajación, mindfulness…

Llevar a cabo yoga con pequeños es viable y tiene mucho más provecho de los que imaginas.

 

• Ganan concentración, memoria, atención y también imaginación.
• Desarrollan su elasticidad, agilidad, equilibrio y coordinación.
• Consiguen seguridad en si mismos y autovaloración.
• Mejoran los sentidos.
• Es una herramienta a fin de que la cabeza aprenda a supervisar el cuerpo.
• Aprenden técnicas de relajación y respiración.

 

«El valor del yoga es imposible expresar, ha de ser experimentado» BKS Iyergar

 

 

Naturalmente, no charlamos siempre de llevar a cabo una clase de yoga de una hora, ni muchísimo menos. Sino más bien tomar conciencia del cuerpo y de la respiración.

Para esto vamos a apoyarnos en los juegos, de qué forma no. Y en un caso así asimismo en los libros.

Aquí te dejamos estas proposiciones.

 

Este libro que va por su 6ª edición, es una joya con guía de lectura incluida.

Un diálogo de una madre y un niño, en el que la madre le enseña ejercicios  para tomar conciencia de su respiración.

Las ilustraciones son un auténtico obsequio que invitan a hacerlas con tu hijo de manera sencilla y entretenida.

 

 

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Estírate como un árbol, reluce como una estrella, flota como una nube y prepárate a soñar.

Y  la versión Buenos días yoga para comenzar el día con buen energía y con ganas de comerte el planeta.

 

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Crea una rutina con estas 20 cartas de posiciones de Yoga similares con animales o elementos de la naturaleza.

Memoriza las asanas o inventa y representa una historia con las cartas que te hayan tocado.

Tomar conciencia de cada centímetro de nuestro cuerpo es tan apreciado como alimentarte o reposar.

 

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Descarga estos imprimibles para hacerlos sobre tu tabla curva o sobre cualquier área.

Diviértete, ahora va a llegar el instante que en el que toque relajarse.

 

 

[imprimible gratis]

 

«Cabeza quieta, espalda recta y corazón relajado» Walter Franco

 

Otra oración que nos atrae bastante es esta que ha dicho el Dalai Lama: Si enseñásemos meditación a cada de niño de 8 años erradicaríamos la crueldad en tan únicamente una generación.

La conclusión es que por medio de estos juegos, tu hijo va a aprender a encauzar sus energías, a conseguir su tranquilidad, a conectar con su respiración y así mismo con su corazón. Y es muy posible que en el momento en que se expanda sea con la capacidad de enfrentar sus inconvenientes con calma y solidez.

 

Cuéntanos, ¿haces yoga con tus hijos?

¿Te animas?